lunes, 25 de febrero de 2013

A propósito de Facebook.

Si tuviera más madurez, posiblemente no escribiría. Se me notan demasiado los descosidos en el traje. Me sobran vanidad y atrevimiento y me faltan humildad y sabiduría.
Y sin embargo aquí estoy, una y otra vez ante el jodido muro que me pregunta, sin importarle tres pepinos mis dudas y mis miserias, :"¿Qué estás pensando? "
Claro que, podría mandar a freir espárragos al curioso impertinente y seguir leyendo lo que más abajo me proponen mis amigos y navegar sin sobresaltos...
Y sin embargo algo dentro de mí me empuja a desnudarme, a compartir lo que pienso, a comprometerme, aunque quede a la intemperie, aunque algunos no lo entiendan, aunque pueda decepcionar a aquellos que me quieren. No puedo evitarlo. O tal vez no quiera. ¡Vaya usted a saber! ¿Pero como pararme a pensar en estos momentos en las pequeñas desventuras de mi alma y no entrar a ocuparme con todas sus consecuencias de los desafueros que la corrupción, la incompetencia y una ideología política depredadora y desalmada están causando en nuestra convivencia.?

domingo, 24 de febrero de 2013

La Gran Noticia Del Día.

Fue un día frío, pero menos de lo que habían augurado los hombres y mujeres del tiempo. Mejor así. No estoy ya para demasiadas heroicidades. Además, salió el sol y no sólo calentamos nuestros cuerpos sino que en algo pudimos remediar nuestra maltrecha moral. Es lo que tiene la luz. La bendita luz.

 Muchos esperábamos con ilusión este día. No era una fecha cualquiera. Nunca lo será. El 23 de Febrero está marcado a fuego en nuestra conciencia colectiva. Pero no creo que se buscara a posta. Era un sábado y coincidió. Mejor así. Será más fácil retenerlo en la memoria.

 Los medios de comunicación pasarán de puntillas. Seguro. No espero otra cosa. Estarán más pendientes del Duque, de la Infanta, de García Revenga, del escándalo del Instituto Nóos y de la Gurtel. Vende más. A fin de cuentas, son empresas con ánimo de lucro y han de dar cuenta a sus accionistas. De los otros, de la Radio televisión pública, mejor no hablamos. Hace tiempo que traicionó a la ciudadanía vendiendo su independencia. Sirven a su señor.

 Eso si, hubo un político que si pareció darle importancia. Se llama Salvador Victoria y es Consejero de la Presidencia de la Comunidad de Madrid. Se creyó caudillo por un día, y se dio un festín.

Con voz molesta y autoritaria lanza a las redes estas lindezas:

"La marea antisistema y antidemocrática de esta tarde, es un tsunami contra las libertades y la democracia parlamentaria."

 "Necesitamos democracia, no que hoy, como hace 32 años, los enemigos de las libertades tomen el Congreso y las calles."

 En realidad no había dicho nada nuevo. Es algo que vienen repitiendo sus jefes desde que alumbró el 15M. Tienen un miedo cerval a la gente, a la gente en la calle, a la gente reclamando derechos, a la gente exigiendo justicia, a la gente repudiando las mentiras, a la gente demandando trabajo, educación, cobijo. Tienen miedo a la gente en libertad.

 POR ESO FUE UN DÍA MARAVILLOSO. Porque todas las mareas y todos los colores inundaron las ciudades de nuestro País. Porque, de forma pacífica, la gente tomó las calles y gritó a los cuatro vientos que el poder está en el pueblo y procede del pueblo. Que el parlamento y los gobiernos de turno no pueden gobernar ni legislar de espaldas a él. Que no se puede gobernar con mentiras. Que los mandatos son delegados y nadie puede saltarse el programa aprobado con un, "Cumplo con mi deber". Porque quién manda los deberes es el pueblo y no ningún "Salvador". Bienvenidos a la democracia.

 Si, esta ha sido la Gran Noticia Del Día.

jueves, 21 de febrero de 2013

Confidencias

Lo que estoy a punto de contarles puede que sea demasiado personal. Es probable sin embargo, que muchos de ustedes puedan sentirse identificados. Me alegraría mucho que así fuese. Me sentiría más acompañado y menos singular. No me gusta sentirme singular.

 Desde que era pequeñito sonreía y saludaba a la gente con la que me encontraba por la calle, aunque nunca les hubiese visto. Solían responderme sonrientes y sorprendidos. Aunque fueran extranjeros. Y me sentía bien. Acogido, valorado, querido.

 Bastantes años después, cuando regresaba con mi mujer y mis hijos a descansar a las playas del Sur de mi Isla, solía compartir cercanías con familias Suecas o Alemanas. En muy poco tiempo, y a pesar de mi enorme inutilidad para comunicarme en otra lengua que no fuera la mía, entablaba una relación respetuosa y amable apoyándome exclusivamente en el lenguaje corporal: sonrisas, miradas, inclinaciones de cabeza o algún tímido y atrevido "Good-bye", "Guten Abend" o "God Dag" aprendidos a toda prisa. Mis hijos, adolescentes irredentos, escapaban avergonzados, mi mujer sonreía y valoraba con cariño mi búsqueda de afectos.

Cuando llegaba la hora del adiós, aunque sólo hubiésemos compartido pequeñas muestras de buena vecindad, Elena y yo lamentábamos que las personas no tuviésemos un idioma común con el que poder comunicarnos. Y sentíamos frustración. Y mucha pena cuando nos percatábamos de que nunca más volveríamos a verles.

 Toda la vida está llena de pérdidas no deseadas. De adióses equivocados, imprevistos, irremediables. Pero llegas a acostumbrarte. Aunque la pérdida te marque, te mutile o te pierda. E intentas seguir viviendo.

 Sin embargo, a veces se produce el milagro. Y los recuerdos que nunca te abandonaron y que un día contaste, son captados por otros, revividos por otros, compartidos con otros. Y tu vida se llena de colores. ¿Pueden llegar a imaginarse lo que significa recuperar cuarenta y muchos años después, paisajes, rostros y afectos que parecían perdidos u olvidados? ¿Podría alguien llegar llegar a comprender la alegría que supone reencontrarte, cuando ya no esperas nada, tanta riqueza regalada?

 Agradezco a Facebook y a Teldeactualidad que hayan propiciado este obsequio inesperado.