lunes, 5 de mayo de 2014
Actores que representan personajes.
La exposición permanente en los medios o las tribunas públicas pueden hacer de nosotros actores que representan personajes.
Y ese personaje no es quién soy; sólo es un triste remedo que otros se han encargado de construir para mi.
Y sin embargo, con frecuencia, por comodidad, por vanidad o por penosa imbecilidad, aceptamos aparentar lo que otros quieren que seamos, o lo que desearíamos haber sido y nunca fuimos. Y acabamos convirtiéndonos en un fraude.
Así es imposible que nuestras palabras o nuestras acciones transformen nada.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario